domingo, 21 de septiembre de 2008

Critica de Disco - Grandes éxitos de ayer y oink! (Chancho en Piedra) (15-09-08)

Grandes exitos de ayer y oink!

Chancho en Piedra sacó un buen compilado en donde recorre su historia.

Con algo más de una década en sus espaldas, los chilenos de Chancho en Piedra aprovecharon que en el 2007 se festejó el “año del cerdo dorado” y editaron sus “Grandes éxitos de ayer y oink!”, en el que recorren sus siete discos y ofrecen cuatro temas nuevos. El estilo lúdico que caracteriza a la banda se hace presente desde la gráfica en donde los integrantes aparecen vestidos como samurais listos para dar batalla.

Desde su génesis, el grupo que tomó el nombre de un condimento chileno para comidas, tuvo como principal influencia a los Red Hot Chili Peppers y eso es algo que se puede escuchar durante todo el álbum ya que lo que prima es el funk rock. “Sinfonía de cuna” y “Volantín” son buenos ejemplos de esto pero con el correr de los minutos también van apareciendo diversos matices y nuevos sonidos. La falta de prejuicios en Chancho en Piedra les permite incorporar scratchs de dj´s, flautas traversas y ritmos de cumbia como en “Multi-ricachón”, que originalmente apareció en Desde el batiscafo (2005), bajo la producción de Flavio Cianciarulo. La mentalidad abierta del grupo también los lleva a incursionar levemente tanto en el punk (“Historias de amor y condón”) como en las melodías orientales (“Lophophora oriental”) ofreciendo así una rica variedad pero manteniendo el funk como base.

Lo que se destaca de Grandes éxitos de ayer y oink! es la masterización, que le brinda a los temas una calidad sonora notable y permite apreciar cada detalle instrumental. Felipe Ilabaca (voz, bajo y coros), Eduardo Ibeas (voz y coros), Pablo Ilabaca (voz y guitarra) y Leonardo Corvalán (batería, percusión y coros) se lucen y alternan sus destrezas sin abusar del virtuosismo, logrando que el tema sea el protagonista. Desde la lírica, los Chancho en Piedra juegan con la ironía sin dejar de lado la crítica contra el sistema y la sociedad consumista aportando toques de “chilenidad” pero con un mensaje latinoamericano.

Por lo general, los compilados no suelen aportar nada nuevo a las discografías de las bandas. Sin embargo, Grandes éxitos de ayer y oink! sirve como una buena muestra para que el público argentino pueda adentrarse en el mundo de Chancho en Piedra.

Christian Alliana para www.elbondi.com

Critica de Disco - Indigencia y Distancia (Cientificos del Palo) (08-09-08)

Indigencia y Distancia

En su segundo disco, Científicos del Palo rockea en trece temas intensos.

Con más de diez años a cuesta, Científicos del Palo se va consolidando de a poco como una banda de renombre y con un público propio. Indigencia y Distancia es el resultado más claro de tanto tiempo de pelearla en el under desde su Mar del Plata natal. Y si bien en su disco debut contaron con la participación de Diego Arnedo, Ricardo Mollo y Jorge Araujo (Divididos modelo 2004), en este nuevo álbum tratan de despegarse un poco más de esa influencia aunque lo logren parcialmente.

Esta segunda placa abre bien arriba con “Camino” y en el segundo tema, “Dormijito”, hace su aparición por primera vez Ricardo Mollo para sumar su voz y su viola en este hermoso reggae dedicado al hijo del cantante y guitarrista Pepo San Martín. “Código morsa”, con sus dulces violines, continúa la línea tranquila del track anterior pero en “Until the victory” la banda vuelve al rock con una letra combativa y frases punzantes como: “la clase media es el mejor sedante para el cerebro humano”.

“Los gomías” es un homenaje a esas personas que siempre están, destacándose el baterista Nicolás Terrén quien se pasea por todos los cuerpos de su instrumento y Pepo se luce en un solo con aire setentista. Positivamente, el grupo incluye ciertos respiros que rompen con el molde del rock, en temas como “Tarde” con su ritmo medio candombero y el funk de “Dos” y “¿Pa´ quién va a ser sino? (con un gran trabajo del bajista Carlos “Popete” Andere). “Fucking amor” transmite paz y permite apreciar la calidad de cada uno de los músicos, algo que continúa en “Vietnam”, un reggae con algunas estrofas de “Exodus” de Marley y en donde se hace presente nuevamente Ricardo Mollo.

El final llega con el acústico “Vosnovasaveniradecirmequiénsoy”, una canción autorreferencial, casi psicológica, en la cual Pepo se plantea interrogantes personales y “Voy al mazo”, un rock al palo que se desarrolla en tres intensos minutos.

Indigencia y Distancia representa un nuevo camino en la madurez de Científicos del Palo y deja en claro que, más allá de la influencia de Divididos, el grupo de Mar del Plata tiene una personalidad propia que mostrar.

Christian Alliana para www.elbondi.com

Informe especial - ¿Rocanrol o Rock and Roll? (25-08-08)

¿Rocanrol o Rock and Roll?

Bandas argentinas que cantan en inglés. ¿Una posibilidad factible? El Bondi rompió las barreras del idioma para acercarte este completo informe.

“Primero tenía que cantar en ingles, luego – por Malvinas – en castellano. Y ahora los tipos de CBS quieren que vuelva al inglés. A veces canto en castellano, y otras en inglés. También mezclo ambos idiomas en el mismo tema. Ya sé que la gente no entiende el inglés pero aunque Los Beatles llegaran a Obras tampoco nadie los entendería”. (Luca Prodan a la revista CantaRock, mediados de los 80`s). Así describía el líder de Sumo su situación ante la dicotomía que se le planteaba a la hora de encarar las letras de un tema. Años después varias bandas argentinas se encuentran con la misma problemática y resuelven este dilema cada una a su modo.

Desde las denominadas “invasiones inglesas” de mediados de los años `60 nuestro rock se vio influenciado por grupos extranjeros de Estados Unidos pero principalmente de Inglaterra como los Beatles y los Rolling Stones e incluso muchas bandas que se gestaron en aquél momento como Los Jets, Los Mockers y Los Shakers (provenientes de Uruguay) comenzaron sus carreras imitando a aquellas en todos sus aspectos. Tuvieron que pasar varios años para que nuestro idioma comenzara a entrar en el universo de la cultura rock con los primeros singles de Los Beatniks, Manal, Almendra y Los Gatos quienes fueron pioneros en eso de tener letras en castellano mostrando de esta manera que ese camino era posible. Incluso es conocida la anécdota en donde Luis Alberto Spinetta, al término de un show de Mach 4 (luego Vox Dei), les dijo a sus integrantes: “Loco, la banda suena un montón, pero ¿por qué teniendo todo el idioma, cantan en inglés?”. El bajista Willy Quiroga le respondió: “¿Sabés que tenés razón?” y así fue que tradujeron todas las letras cambiando su manera de componer.

En la actualidad, son pocas las bandas que utilizan el inglés como medio de expresión, motivo por el cual El Bondi investigó a fondo sobre esta otra variante y recolectó varias opiniones. Consultado sobre las razones por las cuales deciden seguir este difícil camino, Buco, cantante de Lashaout, nos dijo: “Me es mucho más difícil terminar una buena canción en castellano ya que el inglés me resulta más fácil para entonar. También hay muchos fraseos que quedan bien de esa manera y que en español quedarían ridículos.” Idéntico es el caso de Andrea Prodan de Romapagana: “naturalmente me sale expresarme así, podría utilizar el italiano también pero no serviría para el rock”. Por su parte Gastón Bar-rabía, guitarrista de Pork, coincidió en que “componer en nuestro idioma me resultaría más complicado, los argentinos somos más rebuscados a la hora de hablar por lo que las letras son como más poéticas”.

Sin embargo, el baterista de Headphones, Emiliano Pasqualicchio, habló sobre las influencias de las bandas extranjeras sobre las nacionales, agregando de este modo una nueva razón a las ya mencionadas y afirmando que “es una cuestión de formato y de hacer lo mismo que escuchás como es el punk británico en nuestro caso”. Javier Gomez de T.O.C apoya esa idea aduciendo también que “está el prejuicio de que si sos de acá, tenés que cantar en el mismo idioma en que hablás”. Un poco más tajante fue la declaración que dio Diego Arango, baterista de Los Álamos, a la revista VuenosAirez: “cantamos en inglés porque no hacemos rock nacional”.



NINGUNOS IMPROVISADOS…

Todas las bandas consultadas coinciden en el valor de aprender correctamente el idioma en cuestión para no ser improvisados en el tema. Claro que aquellos que vivieron en países anglosajones tienen una ventaja sobre los que comenzaron dejándose llevar por la sonoridad, como nos explicó Buco: “arranqué cantando por fonética, sin saber si algunas palabras estaban bien o mal pero siempre estudié y lo sigo haciendo para poder perfeccionarme”. Por su parte, Gastón (Pork) vivió en Estados Unidos cuando era chico y su primer acercamiento a la música se dio en el país del norte, incluso formando algunos grupos con influencias del grunge, por lo que el acercamiento al idioma se dio por decantación.

Como bien se sabe, desde hace mucho tiempo el inglés es la lengua predominante en el mundo y por lo tanto, saber hablarlo tiene numerosas ventajas. En el ambiente de la música, el mayor beneficio está en la posibilidad de establecer contactos que permitan abrir puertas en el exterior y de esta manera poder difundir los trabajos de las bandas. Tal es el caso de Lash Out, cuyos integrantes se mandan mails con grupos de todo el mundo, se ponen en contacto con los sellos discográficos internacionales e incluso lograron que este año se edite su disco en Estados Unidos y Alemania. En el caso de estas bandas, la barrera que representa el idioma parece achicarse pero no todo es color de rosa ya que Headphones, por ejemplo, también envió su disco a Inglaterra y a España aunque a ellos les pidieron que vayan a tocar allá para poder defender su música en vivo y esto muchas veces no es posible dado que no todos los grupos cuentan con la infraestructura necesaria para realizar este viaje. A Pork, en cambio, cantar en inglés no les abrió ninguna puerta en el exterior pero según su guitarrista “nuestra misión es llegar a todo el mundo”.

EL PÚBLICO, LAS DISCOGRÁFICAS Y EL MERCADO

Claro que antes de mirar afuera, las bandas argentinas intentan ganar al público local aunque esto a veces sea muy difícil ya que la gente tiene prejuicios al respecto e incluso en muchos casos reina un cierto nacionalismo que no permite abrir la mente hacia nuevas propuestas. Por lo general, los espectadores al ver un grupo nacional esperan que ésta cante en castellano y el mejor ejemplo lo da Buco: “Al principio se nos hacía difícil tocar con público que no era nuestro porque para los argentinos las canciones llegan más por las letras que por la música. Se pierde la curiosidad por saber qué quieren decir los que cantan en otro idioma, hoy todo es tan rápido y fácil de conseguir que si no lo tenés al instante nadie se preocupa por averiguar nada”. En la vereda casi opuesta, los chicos de Pork dieron su versión afirmando que “los que asisten a los conciertos no nos ven como algo raro porque escuchan la misma música que nosotros y se dejan llevar por lo que transmitimos en vivo”. Una tercera posición es la que plantea Emanuel Sáez, voz y guitarra de Buenos Aires Karma: “Hay tres divisiones: aquél al que le gusta que la banda cante inglés, aquél que la descarta directamente y un tercero más abierto que le da una oportunidad más allá del idioma”.

Lo más curioso del asunto es que el público nacional está acostumbrado a consumir música en inglés aunque ésta siempre proviene de números extranjeros y se le presta más atención a los solos de guitarra o a las melodías que a las letras. En cambio cuando se trata de escuchar un disco o un artista de acá la gente además espera cierta lírica que tenga un mensaje, algo con lo que sentirse identificada y ahí es donde reside la mayor incógnita que deriva en la pregunta obligada: ¿por qué los argentinos consumimos casi todo lo que viene de afuera sin plantearnos nada al respecto y cuando algún local quiere expresarse de esa manera se lo cuestiona o se lo mira de reojo? Obviamente no existe una sola respuesta y como vimos varía según los casos.

Por otro lado, se encuentran las compañías discográficas que deberían darle el apoyo a las bandas nacionales para poder crecer pero que sin embargo apuestan a un mercado donde la cuota de música en inglés está cubierta por grandes grupos extranjeros que ante cada visita a nuestro país llenan estadios a piaccere. Emiliano de Headphones parece afirmar esta realidad: “El público nos acepta, los que nos cerraron las puertas están en el negocio de la música. Como anécdota nos quedó la vez que en Musimundo pusieron nuestro disco en la batea de artistas internacionales, eso te pinta un poco el panorama”.

Los chicos de Buenos Aires Karma están por editar su tercer álbum que, por sugerencia de su productor, en su mayoría está cantado en español y si bien ellos decidieron probarlo, tomando este hecho como algo transitorio, queda la sensación de que el grupo debiera adaptarse así a lo que el mercado espera de una propuesta nacional. Nuevamente, el rock y el sistema parecen darse la mano dejando acorraladas a las expresiones artísticas que plantean nuevas alternativas vislumbrando de este modo un horizonte no muy alentador.

SUMO: LA EXCEPCIÓN

Casi todos los entrevistados reconocen a Fun People como estandarte en esta tarea de cantar en inglés pero sin dudas Sumo fue el único grupo que logró masividad y reconocimiento en este rubro. La figura emblemática de Luca Prodan, cantante italiano educado en Escocia, fue fundamental para el progreso de la banda ya que su bagaje musical trajo a la Argentina distintos conocimientos que a principios de los ochenta eran nuevos para estas tierras. En su arribo a las sierras cordobesas, el pelado no hablaba español, por lo que sus primeras composiciones se centraron en el idioma en el que fue educado pero, con el correr del tiempo, Luca fue aprendiendo castellano y esto se reflejó en sus letras que en muchas ocasiones eran un híbrido que podían mezclar también el italiano o el escocés.

Consultado sobre por qué piensa que Sumo logró alcanzar un reconocimiento popular a pesar de no cantar en español, Andrea Prodan nos dijo: “mi hermano logró cruzar la barrera de los idiomas por su personalidad. En un comienzo el público que seguía a la banda era elitista, que viajaba al exterior y que cuando veía acá a un tipo haciendo lo mismo que en Europa o Estados Unidos, quedaba fascinada”. Buco de Lash Out cree que “Luca fue un privilegiado porque todos sabían que había vivido en Inglaterra y por eso nadie le cuestionaba que cantara en otro idioma, fue algo excepcional”. Sin embargo, este caso fue único en nuestro país ya que hasta el día de hoy no hubo ni hay una banda argentina que cante en inglés y tenga la masividad que tuvo Sumo.



En el exterior, también existen muchos ejemplos de grupos que no se expresan en su lengua natal y apelan al inglés. A nivel masivo, el heavy metal de los brasileros Sepultura es el más popular pero grupos como Kreator (Alemania), Rapshody (Italia), Premiata Forneria Marconi (Italia) y The Blue Van (Dinamarca) dan a conocer su arte con letras foráneas. Sin necesidad de cruzar el océano, tenemos el caso de Guillermo Savoy, vocalista de los uruguayos Silicon Fly, quien opina que “hay un concepto que es más global, hay cosas muy regionales todavía pero La Abuela Coca y La Vela Puerca han ido a tocar a lugares dónde el español no es lo que domina y les fue bien. Hoy en día hay una aceptación de la música por lo que es, por el mensaje que trasmite y cómo lo trasmite más allá de si cantan en inglés o español”.

NO FUTURE?

Desde sus comienzos el rock argentino se vio influenciado por artistas anglosajones e incluso las primeras bandas comenzaron cantando en ese idioma. Luego, cuando el movimiento comenzó a tomar otro rumbo, los artistas empezaron a componer en castellano y se dieron cuenta de que no sólo la música era lo importante sino que también podían decir sus verdades utilizando otra faceta. A partir de entonces, las letras siempre tuvieron una lírica muy especial que se ganó el respeto en todo el mundo de habla hispana.

En estos días los grupos nacionales que cantan en inglés son muy pocos y se mueven en el circuito under (¿o debería decirse subterráneo?). Si bien son varias las razones por las cuales utilizan otro idioma como medio de expresión, en general son sus influencias las que los motivan a transitar ese camino, en coincidencia con lo que hacían las primeras bandas de acá a comienzos de los años sesenta. Claro que encarar un proyecto de estas características no es fácil y en muchas ocasiones genera trabas difíciles de sortear sobre todo con el público que, si bien está acostumbrado a consumir música en inglés, cuando escucha una agrupación local espera que ésta cante en castellano. El ejemplo más significativo está en que ningún grupo de este estilo llegó a la masividad excepto Sumo pero esto se dio principalmente porque su cantante era europeo y en nuestro país se desenvolvió de acuerdo al bagaje musical que arrastraba del viejo continente.

Hay que tener en cuenta también que las bandas argentinas que utilizan otro idioma tienen en su mayoría como meta llegar a mercados extranjeros aunque el camino les presenta piedras ya que, como nos dijo Andrea Prodan: “los anglosajones son muy cerrados y es difícil que acepten a un grupo extranjero aunque éste cante en inglés”. Así las cosas, estas agrupaciones no se rinden e intentar darse a conocer con su arte a pesar de las barreras. God bless them.

Christian Alliana y Gonzalo Sanchez Segovia para www.elbondi.com
Ilustración: Raúl Sanabria

Fluido - Unione e Benevolenza (22-08-08)

Tres en el mismo podio

Aladelta, Cirse y Fluido se presentaron en Unione e Benevolenza para dar a conocer sus discos debut ante una buena cantidad de público.

El viernes, en la previa a la final olímpica que disputaría más tarde la selección argentina de fútbol, más de doscientas personas dejaron de lado por un rato su fanatismo y se acercaron hasta el sótano de Unione e Benevolenza para disfrutar de tres buenas bandas. Así fue que El Bondi se calzó la celeste y blanca y se acercó hasta Congreso para contarte lo mejor que ocurrió en la noche.

El puntapié inicial lo dieron los chicos de Aladelta, provenientes de Lomas de Zamora, quienes combinaron diferentes matices del grunge y lo alternativo para mostrar su primer disco, Descubre (2008), que fue producido por el ex Cabezones, Alejandro Collados. Con un nivel de volumen atronador, la banda integrada por Nicolás Tabarraci (voz), Nesta Baragli (batería), Leo Licitra (guitarra), Juano Bustos (guitarra) y Matías Tarragona (bajo) se desenvolvió con una potencia inusual y recibió numerosos aplausos.

Luego, llegó el turno de Cirse, un ascendente grupo formado en 2003 y que en el 2007 tuvo la oportunidad de grabar su álbum debut junto a Cesar Andrino de Cabezones como productor. Varias de las once canciones que componen Bipolar fueron presentadas en Unione y muchos de los presentes se animaron incluso a cantar algunos temas. La particular voz de Luciana Segovia, con agudos realmente altísimos, le dio un toque distinto a los covers que se mecharon en el set list junto a las propias composiciones. De esa manera, “Alma de diamante” de Spinetta Jade, que Cirse grabó en el tributo marplatense denominado “Al flaco dale gracias!” (2007), sonó conmovedora y “Tainted love” estuvo más cercana a Marilyn Manson que a Soft cell, autores del tema original. En sus 45 minutos de show, reinó la oscuridad y la fuerza de la mano de Gabriel Leopardi en guitarra, Ziva en bajo y Luisao en batería quienes se acoplaron perfectamente a la joven cantante para cerrar con “Welcome to the jungle”.

Finalmente, los rosarinos de Fluido subieron al escenario y durante una hora, demostraron por qué son tan conocidos en su ciudad natal. En esta ocasión, fue la excusa de presentar Complementos (2007) lo que los trajo a la Capital, lugar en donde no tocaban desde hacia dos años y que los encontró con una performance impecable. Ante una buena cantidad de seguidores propios (entre ellos el bajista de Cielo Razzo), los Fluido regalaron canciones como el corte de difusión “Pista o señal” y la adrenalínica “Coincidencia”, todas interpretadas con gran pasión. También aprovecharon este recital para formalizar la incorporación del baterista Juan Pablo Sancho (en reemplazo de Maximiliano Cuello) quien se acopló muy bien al resto de la banda conformada por Lolo Luciani en voz, Javier Vega en bajo y Rolo Prado en guitarra. Con una gran aceptación por parte de la concurrencia, Fluido se despidió de Buenos Aires para mentalizarse en su próxima presentación junto a Catupecu Machu y Massacre el 12 de septiembre en el Metropolitano de Rosario.

Con tres sólidos y potentes shows, Aladelta, Cirse y Fluido calentaron la fria noche del viernes y fueron una excelente previa antes del partido en el que Argentina retendría el oro olímpico. Sin dudas, una noche sin fisuras.


Christian Alliana para www.elbondi.com

Critica de Disco - Autoespionaje (18-08-08)

Autoespionaje Primer disco para Los Hi-Hats y buenas mezclas de pop-rock para repartir.

A tres años de la edición de su primer Ep (De pulpos y calamares, 2005), Los Hi-hats regresan esta vez con un larga duración que contiene doce canciones muy bien producidas. La intención es clara: canciones pegadizas (pero no pegajosas) que juegan con el rock y el pop. Sin dudas, una propuesta muy tentadora para aquella compañías de celulares o empresas de gaseosas que quieran adornar sus publicidades.

Lo cierto es que Los Hi-hats cuentan con una característica no muy común: dos letristas en donde cada uno interpreta sus propias composiciones. Así Martín Mungo (con un registro por momentos cercano a Diego Frenkel y Miguel Abuelo) junto a Juan Pablo Bidegain se reparten las voces durante todo el álbum aportando diferentes timbres vocales. El primero se destaca en la onda cool de “Fantasía” y en el corte de difusión, “Histeria”, mientras el segundo demuestra sutileza en “Fino rosal” que incluye fragmentos poéticos de Homero Manzi.

A medida que transcurre el álbum, las guitarras de Martín Mazzón e Ignacio Marcolini alternan punteos, rasgueos y acompañamientos casi funkys. La base que conforman el baterista Alejandro De Mendonca junto al bajista Ignacio Albarracín suena compacta tanto en los temas más calmos (“Inocencia”) como en los más movidos (“Sáquenme de aquí”).

Un punto positivo es la inclusión de variados matices a lo largo de todas las canciones como ser el acordeón en “Nada que ver” o los vientos en “Deja vu”. Sin embargo, no todo se reduce al pop ya que “Algo para matar” es un excelente ska que trae aire fresco antes de esa especie de bossa nova que cierra el disco como bonus track.

Los Hi-hats demuestran en este álbum que son una banda en ascenso y con buenas canciones. La cerradura de la tapa invita a espiar, sólo hay que atreverse.

Christian Alliana para www.elbondi.com

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Critica de Disco - La suerte la fabricás vos (La Perra que los parió) (12-08-08)

La suerte la fabricas vos

Tercer trabajo para La Perra que los Parió en donde acentúan su costado murguero.

“San Expedito” da la bienvenida a este nuevo álbum de la banda de La Boca y enseguida aparecen los tambores murgueros que serán una constante a lo largo del material. En “La Piedra” las guitarras generan climas interesantes junto al buen trabajo de la base rítmica y el saxo logrando un atractivo matiz.

Cuando el grupo incursiona en el reggae logra una de las mejores canciones del disco: “Por siempre”, en donde también se destaca la percusión de Jorge Bekmesian. Sin embargo, a veces utilizan recursos que remiten a otras bandas (“LPDB” tiene similitudes en su onda disco con “Perra” de Viejas Locas) así como el manejo de las voces y la parte murguera se emparentan notablemente con Bersuit. Que quede claro, no hay copia pero sí una influencia muy fuerte de Cordera y compañía, sobre todo en el registro vocal del cantante Nahuel Amarilla. Este punto hace que al escucha le cueste encontrar un estilo propio en el trabajo de La Perra que los Parió.

El final del álbum contiene dos temas grabados en vivo en el Teatro Verdi: “El loco del arenero”, un rock and roll clásico, y una reversión de “Mejor no hablar de ciertas cosas” de Sumo que no llega a estar a la altura de la original. La suerte la fabricás vos es un disco en el que se respira continuamente el aire murguero de La Boca y con el cual la banda puede colgarse tranquilamente el mote de “barrial” siendo este adjetivo más representativo que despectivo.

Lamentablemente, el ingenioso packaging de cartón, que incluye una estampita de San Expedito, tiene como deficiencia carecer de un booklet con las letras y la ficha técnica. Por lo tanto, la información es un tanto escasa obligando así al oyente a recurrir a Internet u otros medios para completar su correcta escucha.

Murga, algo de reggae y rocandombe son las combinaciones que La Perra utiliza en “La suerte la fabricás vos” pero que no alcanzan para terminar de delinear un estilo propio.


Christian Alliana para www.elbondi.com